Pues sí, ya tenemos la solución, es una mezcla muy sencilla:
Mande Vd. hacer un aeropuerto, preferentemente en una localidad pequeña
Inaugure lo, pero no tenga permisos para su uso, hay que dejarlo un tiempo para botellón, después bien paradito, que no pase ni aterrice ni un solo avión.
La consecuencia es que los conejos campan (uy! lo de Campa me suena...) a sus anchas pensando que todo el monte es "orgasmo".Claro, crecen y se multiplican como tales, como conejos que para eso lo son.
Como hay una enormeeeeeeeeeeeeee cantidad de gente parada, inviertes unos cuatrocientos y y pico mil euros para que la enorme conejera vuelva a su ser (cual era? aeropuerto, centro de botellón, cueva de ...eso)
Unas cuantas- cuentas por aquí y por allá para la cuenta de resusltados, todos tan contentos y ya está el cambio hecho
jajajaja que bueno y cuanta razon tienes........
ResponderEliminarun saludo y Feliz Navidad!!!!!!!